Mostrando entradas con la etiqueta Bob Dylan. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Bob Dylan. Mostrar todas las entradas

jueves, 10 de octubre de 2013

NENA, DEJA DE LLORAR - BOB DYLAN


NENA, DEJA DE LLORAR - BOB DYLAN

Has tocado fondo con un mal hombre, nena,
pero has vuelto a donde perteneces.
Ve a traerme la pistola,
cariño: no distingo el bien del mal.

Nena, para de llorar, por favor.
Deja de llorar.
Deja de llorar.
Nena, deja de llorar, por favor.

Nena, por favor, para de llorar.
Deja de llorar.
Deja de llorar.
Nena, por favor, deja de llorar.

Sabes,
sé,
que el sol siempre brillará:
así que, nena, deja por favor de llorar
porque me destroza el cerebro.

Dirígete hacia el río, nena:
nos veremos allí, cariño.
Ve hasta el río, nena:
te pagaré el billete.

Nena, para de llorar, por favor.
Deja de llorar.
Deja de llorar.
Nena, deja de llorar, por favor.

Nena, por favor, para de llorar.
Deja de llorar.
Deja de llorar.
Nena, por favor, deja de llorar.

Sabes,
sé,
que el sol siempre brillará:
así que, nena, deja por favor de llorar
porque me destroza el cerebro.

Si necesitas ayuda, nena,
o si simplemente quieres algo de compañía,
o sólo un amigo con quien hablar:
ven y a ver qué tal yo.

Nena, para de llorar, por favor.
Deja de llorar.
Deja de llorar.
Nena, deja de llorar, por favor.

Nena, por favor, para de llorar.
Deja de llorar.
Deja de llorar.
Nena, por favor, deja de llorar.

Sabes,
sé,
que el sol siempre brillará:
así que, nena, deja por favor de llorar
porque me destroza el cerebro.

Te han hecho tantas veces daño:
sé en qué estás pensando.
Mira, no hace falta ser un doctor, cariño,
para ver que estás locamente enamorada.

Nena, para de llorar, por favor.
Deja de llorar.
Deja de llorar.
Nena, deja de llorar, por favor.

Nena, por favor, para de llorar.
Deja de llorar.
Deja de llorar.
Nena, por favor, deja de llorar.

Sabes,
sé,
que el sol siempre brillará:
así que, nena, deja por favor de llorar
porque me destroza el cerebro.

(Trad: Raúl Sánchez).

viernes, 1 de febrero de 2013

BALADA DE UN HOMBRE FLACO - BOB DYLAN

www.Tu.tv


BALADA DE UN HOMBRE FLACO - BOB DYLAN

Te metes en la habitación
lapiz en mano:
ves a alguien desnudo
y tú
te dices ¿Quién es ése hombre?.
Lo intentas en serio pero no entiendes
qué es lo que dirás cuando llegues a casa.

Porque algo está pasando aquí pero no sabes qué es
¿verdad, Mr. Jones?

Levantas la cabeza
y preguntas ¿Es aquí donde está?
y alguien te señala y te dice
Es de él
y tú dices ¿Qué es mío?
y alguien más pregunta ¿Dónde está el qué?
y clamas Oh, Dios mío
¿estoy completamente solo aquí?

Pero algo está ocurriendo aquí y no sabes lo que es
¿no es así, Mr. Jones?

Coges el billete
y te vas a ver al friki
que de inmediato se dirige hacia ti
al oirte hablar
y te pregunta ¿Cómo llevas
eso de ser un marginado?.
Y contestas Imposible
mientras te alarga un hueso.

Y algo tiene lugar aquí pero no sabes de lo que se trata
¿a que sí, Mr. Jones?

Tienes muchos contactos
entre los leñadores
para que te consigan información
cuando alguien ataca tu inventiva,
pero nadie tiene consideración alguna
-de todas formas ellos ya esperaban
que les dieras a todos un cheque
para que les desgravara por organizaciones de caridad-.

Has estado con los catredáticos
y a todos les ha gustado tu aspecto.
Junto a eminentes abogados has discutido
con leprosos y ladrones.
Te has empollado todos los libros de F. Scott Fitzgerald.
Eres un tipo muy leído, lo saben todos.

Pero algo pasa aquí y no sabes qué
¿no es así, Mr. Jones?

El tragasables se te acerca y se arrodilla.
Se atraviesa y luego choca sus tacones,
sin previo aviso te pregunta ¿Qué se siente?
y te dice Toma tu garganta: gracias por dejámela.

Y sabes que algo pasa pero ignoras qué
¿o no, Mr. Jones?

Ahora ves a este enano tuerto
gritando la palabra ¡Ahora!
y le preguntas ¿A santo de qué?
y te suelta ¿Qué?
y le dices ¿Qué significa esto?
mientras vuelve a gritar ¡Eres una vaca!
¡Dame un poco de leche o vete a tu casa!.

Porque aquí pasa algo y no sabes lo que es
¿verdad, Mr. Jones?

Te metes en la habitación como un camello
y luego frunces el ceño.
Clavas la mirada en el bolsillo y la nariz en el suelo.
Debería haber leyes para que no volvieras por aquí.
Tendrías que estar hecho para llevar auriculares.

Porque aquí pasa algo y no sabes qué
¿verdad, Mr. Jones?

(Trad: Raúl Sánchez)

martes, 27 de noviembre de 2012

CHICA DE LA CIUDAD NORTEÑA - BOB DYLAN


CHICA DE LA CIUDAD NORTEÑA - BOB DYLAN

Si viajas a la feria de la ciudad norteña
donde el viento pega fuerte en la frontera,
dale recuerdos de mi parte a alguien que vive allí:
en otro tiempo fue uno de esos amores de verdad.

Si vas allí donde caen los copos de nieve,
donde se hiela el río y el verano llega a su fin;
hazme el favor de mirar si lleva puesto un abrigo lo suficientemente arropado
como para resguardarla del viento ululante.

Mira a ver si sigue llevando el pelo largo y suelto,
que se rice y se deslice a lo largo de sus pechos.
Confirma por mí que lleve todavía el pelo largo y suelto:
tal y como mejor la guardo en mi recuerdo.

Me pregunto si se acordará algo de mí:
en ocasiones he rezado a menudo
en la oscuridad de mi noche,
a la luz de mi día.

Así que si te diriges a la feria de la ciudad norteña
donde el viento pega fuerte contra la frontera,
háblale de mí a una que vive allí:
fue hace tiempo un amor de esos de verdad.

(Trad: Raúl Sánchez)

jueves, 11 de octubre de 2012

NO ES A MÍ - BOB DYLAN


NO ES A MÍ - BOB DYLAN

Aléjate de mi ventana.
Márchate a la velocidad que prefieras:
no soy lo que quieres, nena.
No soy quien necesitas.

Dices que vas buscando alguien
que nunca flaquee sino que se muestre siempre fuerte
para protegerte y defenderte
independientemente de que estés en lo cierto o no:
alguien que abra todas y cada una de las puertas,
pero no soy yo, nena.

No, no, no,
no soy yo, cariño:
no soy yo quien vas buscando, chiquilla.

Salte rapidito de la repisa:
pon los pies en tierra enseguida.
No soy ése que anhelas, nena:
sólo conseguiré decepcionarte.

Dices que vas en busca de alguien
que prometa no irse nunca,
alguien que cierre sus ojos para tí,
alguien que cierre su corazón,
alguien que muera por tí y más aún;
pero no se trata de mi, pequeña.

No, no, no,
no soy yo, nena.
No soy yo al que buscas.

Vuelve a desvanecerte en la noche:
todo lo que hay dentro está petrificado.
Aquí no hay nada que ver
y de todas formas no estoy solo.

Dices que vas tras alguien
que te levante cada vez que caigas,
que te coja flores constantemente
y que aparezca siempre que le llames:
un amante dedicado a tu vida y nada más,
pero no soy yo ése.

No, no, no.
No soy yo, chiquilla.
No es a mí a quien buscas.

(Trad: Raúl Sánchez)

domingo, 27 de mayo de 2012

ELEGÍA - BOB DYLAN




ELEGÍA - BOB DYLAN


Me odio por amarte
y la debilidad que supuso:
no fuiste más que un rostro aparecido
en un viaje por el Camino del Suicidio.
El escenario a punto, las luces se apagaron
por todo el viejo hotel:
me doy asco por amarte
y me alegro de que cayera el telón.


Abjuro de ese estúpido juego en el que nos metimos
y de la necesidad que se puso de manifiesto
y de la piedad que me mostraste:
¿quién pudiera haberse dado cuenta?
Salí a la parte baja de Broadway
y sentí aquel lugar en mi interior:
la oquedad donde los mártires se echan a llorar
y los ángeles tontean con el pecado.


Escuché tus canciones de libertad
y del hombre desnudado para siempre
haciendo alarde de su demencia
mientras fustigan su espalda
-como un esclavo en órbita
le apalean hasta domarlo
sólo por un instante de gloria-:
y es una degradación inmunda y putrefacta.


Hay quien venera la soledad:
no soy de ésos
-en esta época de fibra de vidrio
voy en busca de piedras preciosas-.
La bola de cristal de la pared
todavía no me ha mostrado nada:
pagué el coste de estar solo
pero al menos no estoy en deuda.


No soy capaz de recuerdar una sola cosa de valor 
que hayas hecho por mí
salvo darme la espalda una vez
que estaba de rodillas:
nos mantuvimos la mirada
hasta que uno de los dos cediera
-es inútil disculparse
¿qué iba a cambiar con eso?-.


Así que canta tu loa al progreso
y a la Máquina de la Fatalidad:
la pura verdad sigue siendo tabú
aún estando a la vista.
La Dama de la Fortuna que me ilumina
te dirá dónde me puedes encontrar:
me detesto por amarte
pero debería sobreponerme.


(Trad: Raúl Sánchez)

viernes, 30 de marzo de 2012

PLANTADO EN EL PORTAL - BOB DYLAN



PLANTADO EN EL PORTAL - BOB DYLAN


Voy atravesando las noches estivales:
la gramola sonando grave.
Ayer todo iba tan rápido,
hoy renquea.
No tengo lugar al que volverme.
No me queda nada que gastar.
De verte no sabría si besarte o matarte:
de todas formas es probable que ni te importe.


Me dejaste plantado en el portal, llorando.
Ya no tengo a qué aferrarme.


La luz de este sitio es tan inapropiada:
me está poniendo mal de la cabeza.
Todas estas carcajadas no hacen más que entristecerme:
las estrellas se han vuelto rojo cereza.
Rasgueo mi guitarra alegre
fumando un cigarro barato.
El fantasma de nuestro viejo amor no se ha esfumado
y no tiene pinta de que vaya a hacerlo en breve.


Me dejaste plantado en el portal, llorando,
bajo la luna de media noche.


Quizá me atrapen y quizá no:
pero no esta noche y no será aquí.
Hay cosas que podría decir, pero no lo haré:
sé que la misericordia de Dios debe estar al caer.
Me he subido al tren de media noche:
tengo hielo en las venas.
Sería de locos pedirte que vuelvas:
iría contra todas las reglas.


Me dejaste plantado en el portal, llorando:
padeciendo como un imbécil.


Cuando los últimos rayos de luz diurna se disipen,
amigo, ya no te pondrás en marcha nunca más.
Puedo oír las campanas de la iglesia doblando en el patio:
me pregunto por quién.
Sé que no puedo ganar
pero mi corazón no se da por vencido.
Anoche bailé con una desconocida:
sólo me recordó que eras la única.


Me dejaste plantado en el portal, llorando:
en el territorio oscuro del sol.


Como cuando tengo hambre, bebo si estoy seco
y vivo mi vida en el barrio.
Y aunque la carne se me desmorone por la cara
sé que habrá alguien ahí para cuidarme.
Estaba siempre tan cargado de significado
hasta el más mínimo roce.
No veo que vaya a sacar nada con cualquier explicación:
es inútil pronunciar palabra alguna.


Me dejaste plantado en el portal, llorando:
la tristeza me cubre la cabeza.


(Trad: Raúl Sánchez)

jueves, 15 de marzo de 2012

LO ECHÉ TODO A PERDER - BOB DYLAN




LO ECHÉ TODO A PERDER - BOB DYLAN

Una vez la tuve
entre mis brazos.
Me dijo que se quedaría
para siempre,
pero fui cruel
y la traté como un imbécil:
lo eché todo a perder.

Una vez sostuve montañas
en la palma de la mano
con ríos fluyendo
cada día.
Pero debí volverme loco,
no supe lo que tenía
hasta que lo eché todo a perder.

El amor lo es todo, ya ves,
hace que el mundo gire.
El amor y nada más que el amor,
es innegable.
No importa lo que opines al respecto:
no serás capaz de arreglártelas sin él
-acepta el consejo de uno que lo ha intentado-.

Así que, si encuentras a alguien
que te entregue todo su amor,
consérvalo en tu corazón;
no permitas que se extravíe:
porque si hay una cosa cierta
es que seguro que te va a doler
si lo echas todo a perder.

Si lo echas todo a perder. 



(Trad: Raúl Sánchez)

sábado, 18 de febrero de 2012

NO HA LLEGADO AÚN LA OSCURIDAD - BOB DYLAN


NO HA LLEGADO AÚN LA OSCURIDAD - BOB DYLAN


Las sombras se ciernen
y llevo aquí todo el día.
El calor no me deja dormir
y el tiempo se escabulle.
Parece que mi alma se ha vuelto de acero.
Aún luzco las cicatrices que el sol no me ha curado.
Ni siquiera hay espacio suficiente para estar en ningún sitio.
No ha llegado la oscuridad aún
pero se avecina.

Mi sentido de la humanidad se ha ido por el desagüe.
Detrás de cada cosa hermosa
se esconde alguna clase de dolor.
Me escribió una carta, tan delicada:
puso en palabras lo que tenía en la mente
-no veo por qué debería importarme-.
Todavía no ha oscurecido
pero ya empieza.

He estado en Londres
y en el Paris más alegre.
He seguido el río hasta llegar al mar.
He bajado hasta el fondo de un mundo lleno de mentiras.
No busco nada en los ojos de nadie
-en ocasiones mi carga pesa más de lo que puedo soportar-.
No ha oscurecido, de momento,
pero está al caer.

Aquí nací y aquí moriré en contra de mis deseos.
Ya sé que parece que me voy, pero sigo quieto.
Cada nervio de mi cuerpo está tan perezoso y entumecido:
ya ni recuerdo de qué vine huyendo hasta llegar aquí.
No han llegado las tinieblas
pero ya asoman.

(Trad: Raúl Sánchez)

sábado, 14 de enero de 2012

SARA -BOB DYLAN


SARA - BOB DYLAN

Me tumbé en una duna
observando el cielo
cuando los chavales eran todavía bebés
y jugaban en la playa.

Llegaste por la espalda,
te vi pasar de largo.
Estabas siempre tan cerca y todavía a mi alcance.

Sara, Sara
¿Qué fue lo que hizo que quieras cambiar de opinión?
Sara, Sara:
Tan fácil de mirar y tan difícil de definir.

Todavía puedo verlos jugando con sus palas en la arena:
Corrían el uno hacia el otro con los cubos por llenar.
Aún veo los escudos desprendiéndose de sus brazos
mientras se perseguían colina arriba.

Sara. Sara.
Dulce ángel virginal, dulce amor de mi vida.
Sara. Sara.
Gema radiante. Esposa mística.

Durmiendo en los bosques
al calor de una fogata en la noche.
Bebiendo Ron Blanco en un bar portugués.
Luego jugando a ‘Churro va’ y oyendo hablar de Blancanieves.
Tú en el supermercado, en Savanna-la-Mar.

Sara. Sara.
Me queda claro:
nunca podré olvidar.
Sara. Sara:
Amarte será lo único de lo que jamás me arrepienta.

Aún puedo escuchar como tañen esas campanas metodistas,
tomé la medicina y lo superé
quedándome durante días en un hotel de Chelsea,
mientras escribía ‘Sad eyed lady of the lowlands’ para ti.

Sara. Sara:
No importa dónde viajemos, jamás nos separaremos.
Sara. Sara:
preciosa mujer tan querida por mi corazón.

¿Cómo di contigo? No lo sé:
Un mensajero me envió en una tormenta tropical.
Estabas allí en invierno, luz de luna proyectándose sobre la nieve
y en la calle Lily Pond cuando el clima era cálido.

Sara. Sara.
Esfinge Escorpio en un vestido de percal.
Sara. Sara:
deberás perdonarme mi insignificancia.

Ya la playa está desierta salvo por algún alga
y el pecio de un viejo barco arrumbado a la orilla.
Siempre respondías cuando necesité tu ayuda:
me entregaste un mapa y una llave para tu puerta.

Sara. Sara.
Glamurosa ninfa con arco y flecha.
Sara. Sara.
No me dejes nunca. No te marches jamás.

(Trad: Bob Dylan)